Queda aun mas que claro que mi cumpleaños no fue lo mas festivo que hay.
Queda claro que tenia un terrible miedo y lo que es peor, una terrible sensación de que en cualquier momento me moría.
La inminente muerte me estaba llegando...y yo no sabia en que momento.
Si cuando dormía, si cuando me bañaba, si cuando comía, si cuando sonreía brevemente, si cuando quería creer que nada me iba a pasar o si en esos breves lapsos de felicidad.
Necesitaba un psicólogo... así que haciéndole caso a las indirectas que hace años me había tirado mi madre, llame a uno y arreglé una cita.
Verdaderamente tuve unas sesiones muy útiles...tan útiles fueron y tan hondo calaron que un día despues de una sesión tuve un ataque de ansiedad...y si no me morí ahí fue porque todavía tenia muchas ocasiones para pensar en eso.
Mis manitas temblaban, una especie de desesperación incontrolable, de no saber que hacer, y sobarte el cuello con una de las manos, mientras alrededor te preguntan que te pasa, y tiran opciones de lo que pasa...que te bajó la presión, que te sientes y comas algo, que no...que es un Ataque de ansiedad.
Nuevamente llamamos al medico, que decidió tardar tanto que si yo no hubiera estado loca y si de verdad hubiera estado muriendo, ya estaria muerta.
Por telefono una administrativa de Obsba recomendaba un paño frio en la frente y que me acueste levantando las piernas.
Mi hermana embarazada aun, simulaba tranquilidad y argumentaba que no pasaba nada, que me tranquilise que esto le habia pasado a ella, pero mientras se secaba una lagrima...y no exagero.
Mi mamá se quedaba al lado mio, porque yo le agarraba la mano, como si estuviera a punto de morir o parir ...a todo esto, los gatos sobre la mesa se comian la comida de los platos.
Cuando el medico de guardia llegó, yo estaba fresca como una lechuga y el hombre tanteandome un poco el cuello, tomandome la presión dijo "Ataque de ansiedad", recomendó un clonazepan que no tomé, por que ya no tenia nervios y ya no estaba a punto de palmar...sino que tenia una mini tregua con el miedo.
Esa noche dormí y al otro dia me leventé y mientras desayunaba con mi madre, lloré y no sabia por que.
Y por eso lloraba, porque no sabia por que.
No fui a rendir un parcial, sabiendo que eso me hacia perder la materia y me fui a encontrar con mi hermana, para no quedarme sola todo el dia....a ver si me moria.
En la calle pensé que me agarraba un ataque de ansiedad nuevamente, pero subsistí hasta que mi hermana se dio cuenta que no la estaba pasando muy bien y fuimos a su casa.
Llamé a mi psicologo y le dije lo que me habia pasado, por que consideraba que `el debia saberlo´
Capaz el le encontraba una utilidad...para mi solo era un susto mas tangible que el resto.
Solo un susto, porque todavia estoy aca, asustandome.
